Miembros de las comunidades en Villa Alta aseguran que al no profesar el catolicismo apostólico romano son rechazados y amenazados con ser asesinados
En conferencia de prensa, Imeldo y Claudio Amaya Gabriel dijeron que fueron corridos el 6 de julio de la comunidad de San Andrés Yaa, y les destruyeron su templo que era de concreto y de techo de lámina galvanizada.Unas cinco comunidades de Villa Alta Oaxaca sufren de intolerancia religiosa al no profesar la religión católica, pues la población los amenaza con colgarlos o quemarlos.
Imeldo era el encargado del templo por eso, la autoridad encabezada en ese entonces por Macedonio Ramírez Ventura, los sacaron de la población y los persiguieron por más de 1.5 kilómetros por el cerro.
"Nos rompieron, nuestros gallineros, los baños, y el templo, después nos corrieron", señaló.
Dijo que las familias de estas personas se encuentran en esa comunidad y que aun cuando ya presentaron la denuncia ante la Comisión para la Defensa de los Derechos Humanos y ante el gobierno estatal, no hay respuestas.
La autoridad actual que dirige el presidente municipal, Daniel Mateo Marcial, no quiere asumir la responsabilidad y dar respuesta, ya que en el nombre de los usos y costumbres encubre a la población.
Los afectados pidieron retornar a sus comunidades, y es que dijeron que por temor a la persecución en comunidades como: Yatzona, Yahueche, Yatzachim Ayutla, entre otros, los que profesan otra religión se callan.
"Hay más de 15 familias las que creen en la religión Evangélica pero que hasta el momento tienen miedo", dijeron.
Por eso pidieron al gobierno estatal se garanticen los derechos de todos los ciudadanos.
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